Nada más acceder al inmueble se revela el concepto diáfano del que presume la vivienda. A la derecha, comunicada con el salón-comedor que encontramos de frente, se sitúa la cocina. Una cocina de ensueño, con isla central, que mejora la distribución del espacio. Su concepto abierto, propio de los americanos, convive muy bien en este espacio en el que se ha jugado con los elementos arquitectónicos para separar y armonizar el ambiente, dando como resultado una amplia cocina moderna, donde unos muebles blancos y unos electrodomésticos de acero inoxidable de alta gama, contrastan con las lámparas, de estilo industrial, que caen del techo.

Junto a la cocina se ubica la quinta habitación con muy buena proporción y con vistas al jardín. Su ubicación tilda a dicho espacio como dormitorio de servicio o como cuarto de lavado y planchado.

Esta vivienda está muy bien distribuida. Nada más entrar, a la izquierda y junto a la gran estantería del lateral, una puerta comunica con el pasillo del que arrancan las habitaciones: tres dormitorios contiguos, con dos baños enfrentados y, al fondo, el increíble dormitorio principal con el baño en suite. Destacan las puertas de madera en color blanco, con rodapié a juego.

Desde la vista inferior, podemos observar el paralelismo de las diferentes estancias, dejando todos los dormitorios con vistas al exterior en el margen derecho, y en el izquierdo, los baños en la zona interna, a excepción del baño de la suite principal que es el único con iluminación natural.