La Moraleja es, sin duda alguna, una de las zonas residenciales más exclusivas de Madrid. Situada al noreste de la capital, al inicio de la A-1 (Autovía Nacional I-Carretera de Burgos), ofrece a sus habitantes una cuidadísima urbanización y la disponibilidad inmediata de todo tipo de servicios tanto dentro de la Urbanización como en los inmediatos parques comerciales y de ocio situados en las vecinas localidades de Alcobendas y San Sebastián de los Reyes.
Entre sus instalaciones deportivas destaca el Club de Golf -con dos distintos recorridos de 18 hoyos-, reconocido entre los aficionados como uno de los más prestigiosos y acreditados de nuestro país.

En una de sus principales avenidas, y con una ubicación privilegiada por su gran privacidad y exclusividad, se ubica este fatnástico chalet que Ambassador les presenta en este reportaje.

La espectacular parcela de más de una hectárea (10.126 m2) cuenta con preciosas praderas de césped perfectamente cuidado y un arbolado muy consolidado. El jardín que bordea la mansión se asienta sobre un terreno en ligera pendiente para acabar en una parcela totalmente llana. Sobre estas líneas apreciamos el pórtico de entrada con rotonda y zona ajardinada con rosales y encinas así como vegetación tropical.

El inmenso hall de entrada en dos alturas muestra una preciosa escalera de un tramo solada -al igual que toda la zona de recibo- en piedra caliza pulida. Una elegante barandilla en forja con remates dorados acompaña a lo largo de toda la balconada, es aquí donde encontramos también un original aseo de cortesía.

La espectacular zona de recibo en dos alturas cuenta con numerosos ventanales y miradores que vierten a los porches. Altos techos con sencillas molduras complementan visualmente la amplitud de las diáfanas estancias.